La problemática actual que se vive en el campo oaxaqueño se deriva de las políticas públicas dirigidas a él durante los últimos treinta y cinco años, las cuales en lugar de apoyar a las y los pequeños campesinos, ha propiciado que se deje de sembrar maíz y frijol para autoconsumo, al mismo tiempo que han priorizado proyectos agroindustriales para la exportación.
Como consecuencia, muchos campesinos han abandonado sus tierras e incluso algunos las han vendido, para convertirse en jornaleros, migrantes o desempleados en las ciudades, mientras que las comunidades que dependen de la siembra de la milpa (maíz, frijol, calabaza y otros productos) se tienen que rascar con sus propias uñas.
Esta situación se agrava en el contexto de la posible deportación de migrantes oaxaqueños, originada por el agotamiento del modelo neoliberal en los Estados Unidos y la implementación en ese país de políticas proteccionistas.
Ante esta situación, las organizaciones que integramos el Espacio Estatal en Defensa del Maíz Nativo de Oaxaca, lanzamos la campaña radiofónica “Sembremos maíz y la solidaridad entre los pueblos” con la finalidad de hacer conciencia entre las personas de las comunidades rurales: indígenas y campesinas, de regresar al campo, a las parcelas, a la siembra del maíz, frente a la crisis que se avecina.
Si las comunidades aseguramos tener maíz y los productos que se derivan de la milpa podremos contrarrestar cualquier tipo de problemas que se vayan presentando.
Podremos tener dinero, pero si no tenemos maíz, ¿Qué vamos a comer?
Espacio Estatal en Defensa del Maíz Nativo de Oaxaca 